Ideología a lo pobre, acompañada con pie de limón chileno

Cómo cocinar una ideología sin que ésta se transforme en una utopía.

La Ideología a lo pobre es el plato de entrada para variar su menú. Forma parte de una dieta ideal para el ser humano. Lamentablemente esta dieta es poco practicada por el común de los mortales. Pero tenga cuidado señor(a) porque después de una investigación del ICU (Instituto de Cocina Utópica) quedó claro que una utopía no puede alcanzarse con una ideología, porque puede ser dañino para la salud. Lo complicado es lograr que no se mezclen. Como postre el pie de limón es perfecto para esta comida, aunque usted no lo crea. Este final agridulce será el adecuado para usted y sus invitados. Puede acompañarlo con un café para reponerse si así lo desea.

Esta receta va dirigida especialmente a jóvenes o adultos con alma joven que tengas problemas de superhéroes, algún grado de complejo mesiánico o para aquel que crea que sólo él tiene le poder para salvar al mundo. Con esta comida podrá usted poner en practica sus principios sin caer e algo inalcanzable. De esta manera lo estamos ayudando para que pueda realizarse a través de estos planteamientos.

INGREDIENTES:

Ideología a lo pobre:

· Historias Fritas con Expresión Literaria a gusto: Tomar como ejemplo lo ya ocurrido en la historia, para no volver a cometer los mismos errores. Por algo fue que fracasaron las viejas tendencias como el socialismo, la revolución bolchevique o tantas otras que al momento de aplicarlas fallan por distintos motivos. Lo importante es no olvidar mezclar esto con las expresiones literarias de las épocas correspondientes y verlo desde distintas perspectivas. Son bastante útiles, pues la literatura es “hija” de su época.

· Filete de Humanidad: Lógicamente hay que tener claro que el ser humano debe estar sobre la ideología o principio a seguir, pues es el hombre quien hace las ideologías y no puede ocurrir que sea la idea que esté sobre el hombre. Por ello también han fracasado muchas de las viejas corrientes que se fanatizan tanto con el supuesto ideal. Las oligarquías quieren mantenerse en el poder a costa de las ideologías, entonces quedan oprimidos los otros, el resto de la sociedad. Y es que ésta es la lucha de toda la historia.

· Dos filosofías revueltas o fritas: si lo va a hacer frito, la idea es que no lo haga con aceite pesimista saturado en grasas existencialistas, sino en un suave aceite balsámico cuyo humanismo realce el sabor de su comida positiva y que, lejos de provocarle enfermedades a su espíritu, alimente su dasein. Cuidado con el tiempo de cocción de las filosofías, puesto que si es muy largo y a fuego lento nunca llegará a probar el darse a los demás, pero tampoco una cocción a fuego alto porque fracasará antes de que pueda probar su sabor.

· Salsa de Valores: no deben dejarse de lado los valores creados para proteger al humano de su propia sistematización, como por ejemplo los derechos humanos y tantos otros que no implican que el país no sea progresista, sino que aún valora su lugar en la sociedad. Lo que compone esta salsa es:
► cinco cucharadas de Compromiso
► tres cucharadas de Participación Social
► tres cucharadas de Fraternidad con polvos de Respeto para saborizar
► una cucharada sopera de Amor
► un cucharón de Conciencia social
► dos cucharones de Tolerancia
Por ningún motivo se le ocurra motivar a la gente con actitudes comerciales y esnobistas, como lo diría Nietzsche, por que de esta manera lograría crear vacíos dentro de las personas, ya que las cosas materiales no llenan al ser humano.

· Una pizca elemental de empatía: es necesario tener en cuenta que no todos viven bajo la misma realidad. Y si por ejemplo se fuera a hacer alguna ideología que favoreciera a los pobres, hay que ser capaz de ver también que pasaría con los de clase media o con otros sectores de la población. Además hay que estar conciente de las distintas minorías que existen en una sociedad. Y más que juzgarlas y discriminarlas con leyes especiales es necesario saber porqué han llegado a lo que son, para lo que son necesarios especialistas en análisis, como sociólogos y antropólogos. Debe ser un ideal aplicable para la vida de cada individuo con su clase social, educacional y realidad pertinente.

· Ají de verdades comunes: lo complejo de crear una nueva utopía en el siglo XX es que la percepción de realidades está completamente fragmentada. El problema es que provoca un fenómeno de ruptura al buscar un ideal común. Por eso, al momento de encontrar una verdad común parece casi imposible encontrar una que se adecue a las necesidades y creencias de todos. Afortunadamente hay algunos hechos que pueden considerarse como verdades comunes, como por ejemplo. Que matar a alguien no está bien, o que quitarle sus bienes o amores a otra persona no es correcto. Y creo que las bases deben estar muy claras como para construir una legislación que parta de estas verdades comunes que no dependen de alguna religión ni visión particular, sino que son aplicables para todos por igual.

· No se le ocurra echar tecnocracia: es necesario un cambio en la mentalidad de cada integrante de la sociedad en cuestión porque no puede tomarse la sociedad como un compuesto masificado, como lo han hecho la mayoría de las ideologías, que buscan aplicar lo mismo para cada persona. Buscaban masificarlas para una fácil manipulación. El cambio debe ser voluntario, no puede ser manipulado por la biología o la tecnología como se menciona en Un mundo Feliz de Huxley o 1984 de Orwell. Parece muy factible caer en esto, pero recuerde que si lo hace no solo caerá en una utopía, sino que en algo peor: una distopía.




Pie de Limón chileno:

· Dos tazas de Distribución de Fondos en polvo: en un país como Chile es muy importante distribuir los fondos, ya que estos nunca son suficientes para cubrir todas las necesidades del país. Hay que aprender a ordenar las prioridades en las que se debe gastar el dinero. Hay problemas que han estado eternamente en nuestro país y nunca han podido solucionarse. Y es que de repente e pregunto: para que invertir en nuevas carreteras si nadie lo necesitaba? Claro que aporta como una mejora a la nación, no lo niego. Pero porque mejor no construir un hospital nuevo? Es una visión muy personal, pero siento que el dinero se va en asuntos que no son prioridad para los chilenos. Lógicamente no sólo se criticará, sino que también se propondrán soluciones. Por ésta razón quedará este postre con un sabor agridulce que deleitará su paladar.

· 100 gr. Sistema Carcelario y Justicia grasosa:
Para la gente corrupta y los que delinquen por delinquir y no por necesidad tiene que haber sanciones más duras. Nada de que los políticos se van a Capuccino cuando deberían pertenecer a las cárceles normales. Nada de aislarlos pues la vida les devolverá lo que ellos han hecho mal. Para eso es necesario capacitar gente de tal manera, que la famosa frase del derecho griego: “el acusado es inocente hasta que se pruebe lo contrario” de pie a una investigación acorde a la situación y que deje claro si la persona es realmente culpable o no, haciendo válido cualquier tipo de jurisprudencia.

· Una cucharadita de Educación Royal, para que suba la masa: al realizar esta receta verá usted que es necesaria una actitud más positiva en el país a modo de aumentar las buenas acciones por día. Al igual que uno habla de aumentar los ingresos económicos, debería uno también preocuparse pro aumentar otro tipo de ingresos, como los espirituales o emocionales por ejemplo. Estas buenas acciones pueden fomentarse haciendo campañas a través de los medios masivos de comunicación que impulsen a cada chileno a hacer alguna tarea que le haga más feliz el día a su compañero o simplemente a un desconocido. Sabiendo que los medios de comunicación es la manera más masiva de llegar a la gente ¿Por qué no utilizarlos para bien en vez de desaprovecharlo de la manera en que se hace hoy en día?

· Una taza de hospitales dulces: sería ideal que por lo menos se discutiera sobre nuevos hospitales en vez de estar hablando de cambiar el emblema del Escudo Nacional o cosas que no tiene importancia alguna para el diario vivir del común de la gente. Conversan, hablan, platican. Y?. Nunca pasa nada. Me pongo en el lugar de los políticos y claro que debe ser dificil, pero realmente Roberto Sonderegger tiene razón. El gobierno tiene un estante de donde sacar noticias polémicas para tapar lo que realmente está sucediendo. Hablan de cosas que afectan el orgullo de algunos, pero ¿quien soluciona el hambre y las enfermedades de los otros?

· Opcionalmente puede agregarle una cobertura de Partido por la Fraternidad: Este partido es una unión de personas inclinadas hacia ideas humanistas que buscan mejorar y hacer más agradable la sociedad en que vivimos. Porque, más que hacer grandes cambios que afecten o mejoren la situación de sólo algunos, hay que preocuparse de hacerle la vida más agradable a la gente. Y para eso sólo son necesarios pequeños cambios a modo de impulsar un vuelco hacia una mentalidad más positiva y de trabajo en grupo como país. Podría clasificarse como una especie de ideología humanista (que valore al ser humano) aplicada con la consideración real que concierne al tratar una sociedad. Casi a través de la filantropía. A través de esta corriente, que promueve la solidaridad entre personas de distintas creencias y situación socio-económica (a través del sistema de cadena que explicaré a continuación) y de una transparencia bien aplicada de parte del estado para con el pueblo chileno que provocará una mayor cercanía entre el gobierno y la gente, se lograría alcanzar esta sociedad más encantadora.

El Sistema de Cadena es un ingrediente importante de la cobertura. Consiste en una multiplicación de lo que uno hace por el otro de tal manera que, por el mismo sistema, estas buenas acciones se devuelvan hasta uno mismo. Por ejemplo, alguien se levanta en la mañana y se va en micro a su trabajo, entonces: qué le cuesta a ese alguien sonreírle al micrero y saludarlo al subirse a la micro? Cierto que tal vez no le cambie de gran manera el día, pero por lo menos no se le convierte en un día desagradable. Así, en teoría, este micrero le sonreiría al pasajero siguiente que también quedaría con un buen ánimo para saludar o conversar con alguien de su trabajo, quien, según esta teoría, al retornar por la noche a su casa, llegaría con una mejor predisposición para estar un rato con su familia e hijos antes de irse a dormir. Evidentemente todo esto es teoría, pues hay que estar conciente de que son muchos los factores que pueden influir en esto. Pero si cada persona que se subiera a la micro, siguiendo con el ejemplo, e hiciera el mismo gesto, tengo fe en que este supuesto podría dar resultado.

Y no es que por una par de sonrisas se le transforme la vida para bien a la gente, sino que simplemente se haría el día mucho más llevadero si es que las personas son amables con uno. No se busca crear una nueva utopía, sino pensar en algo más alcanzable que beneficie a todos por igual. Y que más fácil y agradable hasta para uno mismo, siempre que de verdad así lo sienta, que hacerle el día agradable a otra persona. No es necesario andar todo el día sonriente, ya que basta con enfocar bien la buena acción del día. Pues una buena acción por persona basta para que hayan, como mínimo, 15.000.000 de buenas acciones por día dentro de nuestro país.

Por eso este Partido sería una forma neutral de hacer ese cambio. Éste no aspira a ninguna perfección, ninguna adquisición de bienes, sino que a algo mucho más necesario y, al parecer, fácil de lograr: hacerle el día a día más ameno al del lado y por medio de un sistema de cadena que los otros sean capaces también de hacerme el diario vivir más feliz.

PREPARACIÓN:

Para preparar la Ideología sólo debe juntar todos los ingredientes y agregarles bastante amor líquido para que llene todos los espacios vacíos y una gran cantidad de compromiso para que esta deliciosa comida no se transforme en utopía. No debe olvidar los agregados de voluntad y conciencia social, para que no se le escape un solo detalle. En el caso del Pie de Limón debe preparar la masa aparte de su contenido agridulce y le recomendamos la cobertura de Partido por la Fraternidad para lucirse ante sus invitados. Ponga atención a las recomendaciones y verá lo fácil que resulta llevar a la práctica esta receta.

RECOMENDACIONES:

♣ No dejarlo con fuego al dente, por que puede transformarse en lo más indeseado: una dictadura que le quitará la libertad a los humanos de la sociedad en cuestión. No se emocione mucho señor(a), que puede fracasar la receta.

♣ Esta receta no es aplicable a cualquier cultura de molde. Debe buscar el molde apropiado. Yo le recomendaría que lo aplique en un molde occidental y preferentemente sudamericano, por que para eso está pensado. Sobre todo si va a ponerle la cobertura de Partido de la Fraternidad. En ese caso le recomendamos un hermoso molde llamado Chile.

♣ Al momento de meter la ideología al horno pensar en la aplicación que tendría ésta en la realidad. Pensar cómo actuarían quienes no estarían de acuerdo con ella. Porque no hay que dejar de lado a los potenciales movimientos que podrían aparecer para hacer frente a la ideología, ya que nunca van a estar todos de acuerdo. Siempre hay minorías y no hay que dejarlas de lado, como corresponde hacerlo en una real democracia.

♣ Para servir correctamente esta comida debe llevarla en una bandeja de material democrático. Porque es el único material capaz de resistir este tipo de comidas. Más aún si va dirigido a jóvenes que forman parte del “demos” y que les gustaría participar más activamente en las decisiones.

Finalmente espero que haya disfrutado de esta receta. Espero que siga las instrucciones al pié de la letra, porque sino puede resultar de su deliciosa ideología una irrealizable utopía, y peor aún una distopía, que tiene un sabor horrible. Recuerde que no vale la pena crear algo nuevo si va a caer en los mismos errores en que han caído ya tantas doctrinas, por lo que hay que ser bastante cuidadoso en la aplicación de esta para no pasar a llevar al pueblo, que, después de todo es la nación y en este caso de Chile. Ellos son los más afectados por las decisiones apresuradas de los mandatarios y superiores que sólo por motivos de dinero tienen cierto poder sobre ellos. Espero que en algún momento se resuelva ésta situación y la gente tome la conciencia social adecuada para contribuir a la solución de estos problemas. Porque yo estoy segura de que si se le diera más participación al pueblo, este sentiría una mayor identificación con el país, que se desembocaría en buenas acciones para con la patria. Este esquema de aparente democracia es identificable en cada institución de la sociedad, como por ejemplo en el Colegio Alemán de Valparaíso. Mi mayor deseo es que esa frase: “el dinero mueve al mundo” desaparezca completamente de la faz del universo.

Bárbara Sonderegger
IVº C, Colegio Alemán Valparaíso
Septiembre de 2005